miércoles, 26 de agosto de 2009

Dormida

¿Cuando empezó?

Muchas veces me lo pregunto.

Me pregunto cuando mordí por primera vez esa man
zana envenenada, cuando sangró mi dedo al desgarrarme con la rueca de la malvada bruja, cuando empecé a pasearme por estos oscuros paisajes que ahora me envuelven, me abrazan en la noche continua rodeándolo todo.

Duermo...

¿Verdad?

Estoy durmiendo, soñando... Nada de lo que vivo es real, pero lo siento tanto... Me duele, me duele y me gusta, me encanta, pero lo odio...

Lo odio.

Pero déjame quedarme aquí, no quiero irme, no me obligues...

Una vez estuve despierta, y sabía que lo estaba, ¿lo sabía? o eso creo... Mis ojos estaban abiertos y podía ver esa luz, mi alrededor... podía verlo todo. Y todo era tan... diferente.
Pero entonces pasó.
¿Cuándo? Ya lo dije, me gustaría saberlo.


Empezó la oscuridad. Ciega en las tinieblas me movía con solo la brújula de mis sentimientos que poco a poco iban marchitando, los pétalos de una rosa cautiva iban caiendo poco a poco, moría... y aun sigue haciéndolo.

Me gustaría también saber que pasará cuando mi brújula me abandone sola y ciega en la oscuridad, cuando ya no quede nada más que mi cuerpo vagando por mis queridos pasajes, cuando ya no me quede nada...
Abandonada y sin más compañía que...


¡Mierda!

No me puede estar pasando, pero no quiero despertar, he estado demasiado tiempo dormida, ciega, a oscuras...

¡Déjame dormir!

Por favor...

...déjame...

2 comentarios:

Felipe dijo...

Estaba trasteando en esloquepensamos y he entrado a tu blog... Ya se que esto es de agosto, pero igual lo miras, así que te quiero hacer mi comentario:

Pensaba que el único de mis conocidos que me rivalizaba escribiendo era Mauro, pero... Joder, escribes mejor que yo. En ese de la chica que se intenta suicidar, te juro que lo he sentido... No me había pasado nunca, ni con libros de autores consagrados. No es broma, no bromearía con algo así.

¿Cómo lo haces? ¿Cómo trasmites emociones? Mil y una veces me he sentido frustrado por ser incapaz de hacer lo que tú has hecho. Ahora mismo me siento entre frustrado y sorprendido. Necesito saber cómo lo haces... ¿Necesitas vivirlo? ¿Imaginarlo? ¿Tener los sentimientos a flor de piel mientras escribes? ¿Porros? ¿Cualidad innata (por favor, que no sea esta)?

PD: Supongo que tienes tus razones para no presentarte al concurso de narrativa del pueblo, pero con ese nivel de escritura y un relato algo menos oscuro tienes muchísimas posibilidades de ganar...

Nada más, espero que algún día lo leas.

PD2: Gñá, no podía faltar, ni aquí.

Anónimo dijo...

Pues sí, lo he leido.
Enserio me has dejado sorprendida con tu comentario, no me esperaba un comentario así, entre otras razones porque no entra demasiada gente en mi blog y comenta... pero bueno. Te agradezco mucho tu opinión.
¿Necesitas saber como lo hago?
Bien... Pues te lo voy a decir.
No es simplemente que necesito vivir lo que escribo, o imaginarlo, o incluso robar los sentimientos a mis personajes... es eso y mucho más. ¿Sabes? Cuando escribo, simplemente lo hago para que mis pensamientos, mis ideas, desaparezcan de mi cabeza, o al menos, me dejen un poco más tranquila. Para entenderlo, cuando una idea me atormenta dandome vueltas por la cabeza, sin dejarme apenas ni pensar en otra cosa, entonces siento una necesidad enorme de escribirlo. Es como si de mejara la consciencia tranquila.
Así que lo que escribo no son más que sentimientos que he sentido alguna vez transformados, ocultando que realmente son los míos...
Cuando una persona siente las cosas al límite (y por desgracia me meto en ese saco -.-) es muy dificil llevar las situaciones sin que las emociones te dominen...
¿Mi único secreto?
Contar un cuento de mis emociones.

Muchas gracias por tu comentario, de verdad.